El hecho de vivir en una ciudad pequeña hace que muchos de nosotros seamos ajenos a ciertas tendencias que aterrizan primero en las ciudades de mayor extensión. En un reciente viaje a Barcelona descubrimos la última sensación en caprichos dulces tras las cupcakes, los frappés y el yogur helado: los bubbleteas.
De origen taiwanés, el bubbletea o boba es un batido a base de leche y té o fruta al que se le añaden unas bolitas de tapioca (el almidón de la yuca) u otros toppings. Se sirven fríos y, he aquí el detalle divertido, con unas pajitas gruesas que dejan pasar las bolitas junto al té al aspirar.
Nuestro primer y gran encuentro con esta dulce bebida refrescante que lleva ya años expandiéndose por Europa fue gracias a Zen Zoo, una de las tantas "teterías" que prosperan en Barcelona que nos agradó especialmente gracias a la calidad de sus tés, al acogedor ambiente del local y la amabilidad de su personal.
Ubicado en una de las calles laterales que empiezan en las conocidas Ramblas, Zen Zoo es un pequeño local que se ha aprovechado al máximo y al que se le ha dado un toque lúdico muy original.
Destaca especialmente por sus "sofás" continuos que abrazan las paredes tapizados con césped artificial que simulan montañas. Sobre éstos se han repartido animales de plástico y unos juguetes realizados por alguien muy habilidoso con la manualidades y con los que se puede retar a tus amigos a descubrir quien tiene mejor puntería. La decoración se completa con lámparas de papel en forma de peces colgados del techo y la bandera taiwanesa. Todo esto, sumado a una iluminación tenue y una música ambiente de pop-rock alternativo, ayuda a crear un ambiente muy confortable de cierto aire oriental y rústico y a la vez moderno y desenfadado.
Servicio:
Curiosos, primero, por el local y, segundo, por el concepto de bebidas, nos adentramos en la "tetería". Fuimos atendidos amablemente por dos sonrientes chicas que, seguramente habituadas a tratar con turistas y locales primerizos como nosotros, nos explicaron en qué consistían los bubbleteas y nos ofrecieron dos pequeñas muestras de esta bebida. Fascinados por el sabor dulce del té y la textura, nueva para nosotros, de las popping bobas, pedimos sin dudar más de aquello. Acomodados en los sofás, nos llevaron las bebidas. No hace falta decir que volvimos más veces.
"No te pierdas la bebida más popular de Asia", reclama un cartel a la entrada. Y no miente, pues la mayor parte de sus clientela son personas de origen asiático. La bebida nació en Taiwán en los años ochenta y se extendió con éxito por toda Asia y Norteamérica en la década siguiente. A Europa llegaron a finales de la década pasada, extendiéndose desde Alemania por el resto del continente.
En Zen Zoo podemos encontrar tres variedades de batidos en tres tamaños diferentes: tés con leche sin lactosa, tés con frutas y los ya conocidos smoothies. Puedes añadir un topping a elegir entre popping bobas (bolitas de gelatina rellenas de zumo de frutas que explotan en la boca), bolitas de tapioca (con una textura similar a las gominolas) o gelatinas naturales o de sabores.
El sabor de los tés es muy agradable. Son dulces y suaves, sin llegar a empalagar. Las combinaciones con las bolitas de diferentes sabores y texturas, por otro lado, son numerosas por lo que se deja al cliente margen para jugar. No obstante, fue difícil identificar el sabor y el tipo de bolitas pues el etiquetado no es precisamente muy claro y visible. Un punto a mejorar.
Probamos el "Funky Coco" y el "Xocolata Monster" con popping bobas de arándanos y el "Taro Jungle" con bolitas de tapioca entre otros. Estaban tan ricos que cuando quedamos con unos amigos, no pudimos evitar llevarles allí. Sin duda por sus caras y comentarios, fue todo un acierto.
El sabor de los tés es muy agradable. Son dulces y suaves, sin llegar a empalagar. Las combinaciones con las bolitas de diferentes sabores y texturas, por otro lado, son numerosas por lo que se deja al cliente margen para jugar. No obstante, fue difícil identificar el sabor y el tipo de bolitas pues el etiquetado no es precisamente muy claro y visible. Un punto a mejorar.
Probamos el "Funky Coco" y el "Xocolata Monster" con popping bobas de arándanos y el "Taro Jungle" con bolitas de tapioca entre otros. Estaban tan ricos que cuando quedamos con unos amigos, no pudimos evitar llevarles allí. Sin duda por sus caras y comentarios, fue todo un acierto.
En conclusión, los bubbleteas son una buena y original opción para aquellos que gustan de estos snacks bebibles en verano y ya están cansados de los habituales. Si estáis en Barcelona, Zen Zoo es sin duda una parada obligatoria si queréis disfrutar de una agradable primera experiencia. Y las otras después de ésta.
Zen Zoo
Carrer del Bonsuccés, 6, 08001 Barcelona
933 01 91 67